«Será remitida a la Policía Federal la solicitud de apertura de investigación para averiguar con detalles lo que podría haber ocurrido, además de diagnosticar donde ocurrió», dijo Silveira a la prensa.
No explicó lo que causó el apagón y solo que hubo eventos registrados en el sistema e informaciones preliminares que apuntan a una sobrecarga en una línea de transmisión en el estado de Ceará (nordeste).
De acuerdo con la cartera, fueron afectados con la interrupción eléctrica 25 estados y el Distrito Federal, lo que se traduce en cerca 29 millones de brasileños.
Cuestionado, Silveira no informó el nombre de la empresa responsable de la línea de transmisión dañada en Ceará y solo apuntó que los datos técnicos serán transmitidos en el «momento adecuado», a más tardar en las próximas 48 horas.
Todas las regiones de Brasil registraron falta de energía eléctrica en la mañana de este martes. En algunas ciudades, el apagón nacional duró algunos minutos.
En horas matutinas, Minas y Energía comunicó que, a partir de datos del Operador Nacional del Sistema, se registró «una ocurrencia en la red de operación del Sistema Interconectado Nacional».
Tal incidente, añadió, provocó la «separación eléctrica de las regiones Norte y Nordeste de las regiones Sur y Sudeste del país», con la interrupción de por lo menos 16 mil megavatios de carga.
El Ministerio certificó en horario vespertino que el suministro de energía fue normalizado en todo el gigante sudamericano.
Silveira había viajado a Paraguay con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva para la toma de posesión del mandatario electo de esa nación, Santiago Peña, y decidió anticipar el regreso a Brasil después que todas las regiones registraran caída de energía.
Ante la prensa, el ministro criticó la privatización de la empresa Eletrobras, lo cual, refirió, hizo mal al sistema y muchos brasileños perdieron con el modelo actualmente adoptado, pero descartó cualquier relación con el sorpresivo corte eléctrico.
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