El portavoz presidencial Nabil Abu Rudeina condenó en un comunicado las incursiones militares en ciudades y aldeas en la ocupada Cisjordania, así como la detención de cientos de ciudadanos.
Las autoridades de ocupación tienen toda la responsabilidad por la peligrosa situación, afirmó.
Al respecto, aseguró que esa política no le proporcionará a Israel ni seguridad ni estabilidad al estimar que solo se lograrán cuando el pueblo palestino obtenga todos sus derechos.
Rudeina llamó a la comunidad internacional, en especial a Estados Unidos, a denunciar “los asesinatos, detenciones, asaltos y el terrorismo de colonos” en los territorios ocupados.
Esos crímenes tendrán repercusiones muy peligrosas porque el pueblo palestino y sus dirigentes no se quedarán de brazos cruzados, subrayó.
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