Durante los trabajos en la ciudad hundida de Thonis-Heracleionen, el equipo detectó los restos del complejo y en su interior artículos de bronce y cerámica importados de Grecia, además de restos de vigas de madera que sostenían el edificio, señaló en un comunicado el organismo.
También encontraron un área de almacenamiento de artículos preciosos y ofrendas para el cercano templo de Amón, la principal deidad egipcia durante el llamado Imperio Nuevo.
En ese santuario, que ya era conocido por los expertos, fueron desenterradas de joyas de oro, incluidos aretes con forma de cabeza de león, un colgante y utensilios de alabastro utilizados para guardar perfumes y ungüentos cosméticos, precisó el texto.
Los arqueólogos también hallaron un conjunto de platos de plata empleados en rituales religiosos y funerarios, así como una jarra de bronce con forma de pato.
Descubierta en 2000, Thonis-Heracleion se encuentra en el golfo de Aboukir y fue considerada el puerto más grande en la costa mediterránea egipcia hasta la fundación de Alejandría en el 331 a.n.e por el rey macedonio Alejandro III, conocido como El Grande o Magno.
El aumento del nivel del mar y los terremotos seguidos de maremotos provocaron que una porción de unos 110 kilómetros cuadrados del delta del río Nilo desapareciera totalmente bajo el mar, lo cual cubrió de agua a la urbe.
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