La institución cultural capitalina, sede por estos días del III Encuentro Internacional de Preservación del Patrimonio Documental: Experiencias y Desafíos, acogió la conferencia Coleccionando a Cuba fuera de sus fronteras, del también escritor y abogado residente en Estados Unidos.
En la cuarta jornada de la cita, que finalizará este viernes, el destacado coleccionista relató su paso por numerosos países en busca de piezas de inestimable valor que reflejen la huella de Cuba en el mundo.
Entre esos tesoros que presume cual padre a un hijo –no podía ser de otra manera- destacan libros, publicaciones periódicas, material de archivo, objetos museables (vajillas, souvenirs), numismática, afiches de películas cubanas, programas de mano, partituras de música, entre otros artículos que resguarda con recelo.
Por los 500 años de La Habana tuve el privilegio de presentar el concierto El mundo le canta a Cuba, en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís, realmente fue extraordinario pues la Oficina del Historiador logró que se musicalizaran por primera vez aquí muchas de las piezas que yo había rastreado, significó.
A su vez, confesó haber catalogado hasta la fecha 5 mil 800 obras musicales de extranjeros inspirados en Cuba.
De acuerdo con el investigador, posee una colección muy interesante de cucharitas de plata, las cuales eran consideradas atractivas en el período de 1890 a 1900.
Con una serie de libros publicados y exposiciones alrededor del orbe, Cueto se define como un coleccionista que piensa siempre en el usuario, sus colecciones se encuentran en orden temático con el objetivo de facilitarle la búsqueda a quienes llegan a su casa en busca de algún documento.
En opinión de la bibliógrafa Araceli García-Carranza, Cueto ha compilado la bibliografía cubana en el extranjero más completa y única de nuestro acervo y patrimonio cultural.
A él le debemos textos relacionados con la historia y la cultura de Cuba como la conferencia Tras la huella de José Martí por el mundo y el volumen La virgen de la Caridad del Cobre en el alma del pueblo cubano, entre otros.
Nada cubano le es ajeno, confiesa el investigador, quien a lo largo de 50 años se ha dedicado a preservar y explorar la huella de su país en cada objeto y nación del planeta.
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