Durante la inauguración del evento en el capitalino Centro Cultural Kirchner, el mandatario destacó la celebración de la cita por primera vez en un país latinoamericano y aseguró que la temática adquirió especial relevancia durante la pandemia de la Covid-19 y en la etapa posterior a la misma.
Es un asunto trascendente, muy preocupante en los tiempos que vivimos. Se trata de un problema creciente, pero sigue siendo un tabú en la sociedad, señaló y abogó por implementar políticas que permitan acabar con la estigmatización de los enfermos y el trato inhumano.
Asimismo, apuntó que la crisis sanitaria fue una “guerra silenciosa” que dejó más de 15 millones de muertos y secuelas psicológicas en personas de todas las edades.
Somos sobrevivientes de una tragedia que afectó a la sociedad. Prestar atención a la salud mental es absolutamente imperioso. Todos deben tener derecho a una asistencia adecuada y eso no pasa por la reclusión indigna en un lugar donde se padecen condiciones de abandono, indicó.
La cumbre concluirá mañana y cuenta con la participación de más de 500 delegados, representantes de 20 organismos internacionales y de alrededor de 30 países.
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