El muro, que fue tema de campaña en su momento del expresidente Donald Trump y también motivo de fuertes reacciones de los demócratas entonces, ahora lo retomará la administración Biden para tratar de frenar la ola migratoria.
No lo hagas, es el mensaje que enviado por Ocasio-Cortez a estos planes. Según un comunicado que difundió esta semana la representante por Nueva York, «la administración Biden no estaba obligada a renunciar a varias leyes ambientales para acelerar la construcción del muro fronterizo».
El presidente -dijo- debe “asumir la responsabilidad de esta decisión y cambiar de rumbo».
Advirtió que un muro no hace nada para disuadir a las personas que huyen de la pobreza y la violencia de venir a los Estados Unidos. “No arriesgas tu vida o la de tus hijos atravesando el Tapón del Darién o atravesando cientos de millas de desierto si tienes otras opciones”, añadió.
«Los muros solo sirven para empujar a los inmigrantes a zonas más remotas, aumentando sus posibilidades de muerte. Es una política cruel», apuntó Ocasio-Cortez.
«Estados Unidos debe tomarse más en serio el examen de la raíz de la migración, reexaminar la política hacia América Latina y dejar de contribuir a la desestabilización que impulsa la migración», expresó la joven miembro de la Cámara de Representantes del Congreso (bicameral) de Estados Unidos.
Un artículo publicado en el sitio digital Common Dreams señaló que en lugar de una mayor militarización de la frontera y barreras fronterizas cada vez más grandes, Ocasio-Cortez está del lado de quienes argumentan que para abordar las preocupaciones sobre los flujos migratorios y las poblaciones de refugiados en la frontera sur, se deben abordar dinámicas más profundas.
«Estados Unidos debe tomar más en serio el examen de la raíz de la migración, reexaminar la política hacia América Latina y dejar de contribuir a la desestabilización que impulsa la migración —como lo han hecho las sanciones a Venezuela del senador Marco Rubio”.
También tenemos que invertir finalmente en una reforma migratoria significativa, concluyó.
El anuncio del actual gobierno conllevaría a que, para fortalecer el muro, pase por encima de 26 leyes federales, esta será la primera vez que usará un amplio poder ejecutivo empleado de manera recurrente en la era Trump (2017-2021).
Entre las ordenanzas que dispensarían se encuentran varios de los mismos estatutos que los demócratas trataron de proteger en el pasado como, por ejemplo, las leyes de Política Ambiental Nacional, de Especies en Peligro, la Federal de Control de la Contaminación del Agua y la del Aire Limpio.
Tras el “aviso de terminación” del muro en el Registro Federal defensores de los derechos de los migrantes y ambientalistas reaccionaron.
Laiken Jordahl, del Centro para la Diversidad Biológica, dijo que era «descorazonador ver al presidente Biden rebajarse a este nivel» para «construir muros fronterizos ineficaces que matan la vida silvestre» que, según los defensores internacionales, también violan los derechos humanos, indicó el propio medio digital.
En un comunicado el grupo enfatizó igualmente que por primera vez el actual gobierno “renunciará a las leyes ambientales, de salud pública y de protección de recursos culturales para acelerar la construcción del muro fronterizo entre Estados Unidos y México en Texas”.
Por su parte, Biden justificó desde el Despacho Oval que no tenía más remedio que acelerar la construcción por una cuestión de presupuesto ya destinado para esos fines.
El gobernante admitió a los periodistas que el muro fronterizo ideado y parcialmente construido por Trump y que ahora continúa construyendo su administración no es una medida efectiva.
“Algunos dicen que el presidente no desea el muro o que su gobierno no quiere el muro, pero realmente lo importante no es lo que quiere o no quiere Biden, sino lo que está haciendo”, sentenció la activista política Gloria La Riva en recientes declaraciones a Prensa Latina.
Para La Riva “lo que debemos resolver, lo que debemos atacar es la causa que provoca esa migración”.
Por eso su propuesta fue concreta, “levanten las sanciones contra Venezuela y Nicaragua, eliminen el bloqueo a Cuba, miren a Haití con otros ojos no los de la intervención, propicien el desarrollo en Centroamérica y no la expoliación de los recursos de esos pueblos y veamos entonces”.
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