La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) precisó que a la cifra de fallecidos se suman mil 500 presuntos milicianos palestinos abatidos por las fuerzas de seguridad israelíes en ese país, según fuentes oficiales.
OCHA también indicó que unos mil 200 israelíes perdieron la vida desde el sábado último.
“Continúan los desplazamientos masivos en toda la Franja de Gaza, el número acumulado de personas desplazadas aumentó un 30 por ciento en las últimas 24 horas”, alertó la entidad en su último parte sobre la situación en la zona tras el inicio de la nueva ronda de violencia.
El alcance de los daños sufridos por la infraestructura civil en ese territorio también es cada vez más preocupante, incluidos los sistemas de electricidad, agua y comunicaciones, subrayó.
Al respecto, indicó que desde el inicio de las hostilidades, siete importantes instalaciones de agua y alcantarillado que abastecían a más de un millón de personas fueron alcanzadas por ataques aéreos y sufrieron graves daños.
En algunas zonas, las aguas residuales y los desechos sólidos se están acumulando en las calles, lo que representa un peligro para la salud, advirtió.
También criticó las afectaciones a 88 centros educativos debido a los ataques israelíes, incluidas muchos planteles que en la actualidad albergan a cientos de refugiados.
OCHA resaltó que “los intensos bombardeos israelíes, desde aire, mar y tierra, han continuado casi ininterrumpidamente” en el enclave costero, donde viven más de dos millones de personas.
Numerosos edificios residenciales en zonas densamente pobladas, incluido el barrio de Al Karama en el norte de Gaza, así como Al Rimal y Al Naser en la ciudad de Gaza, se encuentran entre los más atacados, lo que provocó víctimas entre ancianos, mujeres y niños, alertó.
El organismo de Naciones Unidas señaló que muchas víctimas siguen bajo los escombros, y los equipos médicos y de defensa civil no pueden acceder a la zona debido a la escasez de equipos, las calles gravemente dañadas y la intensidad de las hostilidades.
En la tarde de ayer, la única central eléctrica de Gaza se quedó sin combustible y dejó de funcionar, debido al bloqueo de la vecina nación, recordó.
“El apagón eléctrico significa que no hay suficiente energía para operar pozos de agua y bombear el agua a través del sistema, para operar plantas de desalinización y purificación de agua y para sostener los servicios de saneamiento”, cuestionó.
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