El Estado ocupante destruye el enclave costero y desplaza a sus residentes mientras continúa sus intentos de provocar un estallido en la Ribera Occidental “para poder acelerar el ritmo de su anexión e imponerle la ley israelí”, denunció en un comunicado el Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados.
Al respecto, criticó los cierres de carreteras y de las entradas a pueblos, aldeas, ciudades y campamentos de refugiados en Cisjordania.
Las autoridades de ese país otorgaron a “los colonos armados vía libre para cometer más ataques y asaltos contra ciudadanos, sus hogares y sus vehículos en las calles y carreteras”, alertó la Cancillería.
El texto rechazó los planes anexionistas de amplios sectores israelíes, incluido el titular de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, conocido por sus posturas antiárabes y racistas.
Llamamos a la comunidad internacional a asumir sus responsabilidades para detener la agresión total contra la Franja de Gaza y garantizar las necesidades humanitarias básicas de los ciudadanos de ese territorio, afirmó.
En otro comunicado divulgado horas antes, la Cancillería anunció que sus embajadas y misiones en el exterior “están librando una verdadera batalla contra las narrativas engañosas de la ocupación que intentan criminalizar al pueblo palestino y tildarlo de terrorista”.
El objetivo de esa campaña contra nosotros es completar la liquidación de la cuestión palestina y el derecho de nuestro pueblo a la autodeterminación, alertó.
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