El evento fue para «denunciar lo que Israel hace desde hace décadas contra los palestinos y pedir el fin de la ocupación sionista», afirmó Badra El Cheikh, de Sanaúd Juventud Palestina, uno de los grupos líder de la protesta y citado por la Agencia Brasil.
Manifestó que «somos solidarios, porque la causa palestina es de todos. No en el sentido de ser una causa romántica, sino de representar un pueblo oprimido, así como el pueblo pobre y trabajador es oprimido en Brasil y en el mundo», señaló.
La protesta fue convocada por el Comité de Solidaridad con la Lucha del Pueblo Palestino y en los carteles y discursos aparecieron críticas a la forma en que el Gobierno de Israel actúa en el conflicto contra el grupo islámico Hamas en la Franja de Gaza.
Según los manifestantes, existe una masacre y un «proceso de limpieza étnica» contra los palestinos.
En palabras de oradores, la preocupación era reforzar que la protesta no era antisemita, sino de condena a los ataques militares de Israel y de defensa de la creación de un Estado palestino independiente.
Inesperadamente, el ala militar de Hamas lanzó el 7 de octubre una ofensiva sin precedentes contra ciudades situadas en su mayoría en zonas ocupadas desde hace 75 años por Tel Aviv, en Cisjordania.
En respuesta a esa arremetida, el Ejército israelí puso en marcha la operación Espadas de Hierro y lanza varias oleadas de ataques aéreos sobre Gaza, donde vive dos millones de personas.
Desde El Cairo, capital de Egipto, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, insistió este jueves en su llamado a un alto al fuego inmediato en Gaza para hacer llegar la ayuda y distribuirla de forma segura.
«Estoy en Medio Oriente en una misión humanitaria en un momento de profunda crisis, una crisis como ninguna otra que la región haya visto en décadas», dijo Guterres ante la prensa.
Advirtió que, durante casi dos semanas, el pueblo de ese enclave se ha quedado sin envíos de combustible, alimentos, agua, medicinas y otros artículos de primera necesidad, y alertó sobre riesgos de propagación de enfermedades y la disminución de suministros para la población.
«La gente está muriendo. Y me horrorizaron las imágenes de muertes y destrucción en el hospital de Al-Ahli» en Gaza, donde un reciente bombardeo, sin conocerse aún sus autores, causó más de 500 vidas perdidas, remarcó.
De acuerdo con las Fuerzas de Defensa de Israel, el grupo palestino mató a unos mil 300 israelíes, entre civiles y militares.
El reporte más reciente del Ministerio de Salud de Gaza asegura que al menos tres mil 785 palestinos murieron víctimas de los bombardeos de Israel.
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