Las masacres y el genocidio en la Franja de Gaza no habrían ocurrido sin el mandato abierto para matar, la protección y la impunidad ofrecidas por Estados Unidos y Occidente, expresó el canciller en un comunicado leído por el delegado interino de Siria ante la ONU, Al-Hakam Dendi, y difundido por los medios de prensa aquí.
Agregó que la guerra criminal israelí ha superado toda imaginación por los bombardeos brutales que ascineden al nivel de crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Tel Aviv añadió otro capítulo oscuro y sangriento a su historial criminal con sus bárbaros bombardeos contra el hospital Bautista, la Iglesia Ortodoxa de San Porfirio, la tercera iglesia más antigua del mundo, y las escuelas de la ONU donde se refugiaban los palestinos pensando que son lugar seguro, afirmó el jefe de la diplomacia siria.
Subrayó que la razón principal de la actual escalada se debe a la injusticia aplicada al pueblo palestino durante décadas, en un intento de Israel para liquidar la causa palestina.
Ni las masacres, ni los crímenes de genocidio y ni la política de tierra arrasada pueden afectar la determinación de los palestinos a luchar por sus legítimo derechos, indicó el ministro.
Expresó la denuncia de Siria a la actitud de Estados Unidos y sus aliados en el Consejo de Seguridad al impedir que cumpla sus responsabilidades y detenga la agresión israelí.
De acuerdo con la actualización del Ministerio palestino de Salud, siete mil 28 palestinos murieron, entre ellos dos mil 913 niños, mientras otros mil 650 siguen bajo los escombros a consecuencia de la agresión israelí que ha entrado en su igésimo día contra el pueblo palestino.
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