De acuerdo con el censo demográfico, existen 22 millones 169 mil 101 ancianos con 65 años o más viviendo en el país.
Tal número resulta 57,4 por ciento superior a los 14 millones 81 mil 477 constatados en la operación de registro anterior, realizada en 2010.
Los cambios ocurridos a lo largo de estos 12 años también se observan cuando se analiza la proporción de ancianos sobre la población total.
En el Censo 2010 las personas de 65 años o más representaban 7,4 por ciento de todos los residentes del país y el pasado año aumentó a 10,9.
Por su parte, el total de niños de hasta 14 años disminuyó en 12,6 por ciento, pasando de 45 millones 932 mil 294 en 2010 a 40 millones 129 mil 261 en 2022, mientras hace 12 años, este grupo de edad simbolizaba 24,1 por ciento de toda la población y ahora 19,8.
La proporción de la población de las edades intermedias, entre 15 y 64 años, sufrió ligera variación porque en 2010 encarnaba el 68,5 por ciento del total y en 2022, pasó a representar 69,3.
Según el IBGE, la edad media de la población brasileña aumentó seis años, saliendo de 29 en 2010 y llegando a 35 calendarios en 2022.
El índice de envejecimiento aumentó. Es decir, hay 55,2 ancianos por cada 100 niños hasta 14 años. En 2010, el índice era de 30,7.
Las regiones del país con la mayor proporción de ancianos con 65 años o más son Sudeste (12,2 por ciento) y Sur (12,1).
Entre los estados, Rio Grande do Sul, Río de Janeiro y Minas Gerais lideran la lista. Por otro lado, la población más joven, con niños de hasta 14 años, es más expresiva en el Norte (25,2 por ciento del total de residentes).
De forma progresiva el IBGE divulga datos constatados en el Censo 2022. Según las primeras informaciones, presentadas en junio, la población brasileña tuvo un salto de 12,3 millones en los últimos 12 años, alcanzando un total de 203 millones.
mgt/ocs