De acuerdo con fuentes oficiales, el equipo se encuentra con buen estado de salud tras aterrizar en Dongfeng en el desierto de Gobi, provincia de Mongolia Interior, norte del gigante asiático.
La tripulación salió de la Tiangong o Palacio Celestial luego del relevo de otros tres astronautas a bordo de la Shenzhou-17, que arribó a la estación el pasado 26 de octubre.
Según especialistas, la Tiangong operará durante unos 10 años y debe convertirse en 2024 en la única de su tipo, ya que se prevé el retiro de la Estación Espacial Internacional encabezada por Estados Unidos.
Entre los hitos de la carrera espacial de China se encuentran el rover que llegó a la parte oculta de la Luna, la construcción de su estación y el lanzamiento constante de satélites, entre los más notables aquellos destinados al sistema de navegación Beidu.
La siguiente expedición del gigante asiático a la cara oculta de la luna está programada para el próximo año y prevé la recolección de muestras por parte de la sonda.
Hasta la fecha, Estados Unidos, la antigua Unión Soviética y China son los únicos países que han traído sustancias de la luna a la Tierra, pero ninguno de ellos ha obtenido muestras del lado oculto.
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