Por un lado, la Colectiva Feminista en Construcción pintó un enorme mural en un edificio de la calle Robles con Ferrocarril, en Río Piedras, cerca del campos de la Universidad de Puerto Rico (UPR), donde destacan símbolos de ambas naciones
La obra, titulada Abrazo solidario con Palestina fue trabajada de manera colectiva durante todo el viernes en contra del genocidio que están sufriendo los habitantes de la Franja de Gaza.
En tanto, diversas organizaciones convergieron el sábado en la noche frente al Capitolio, en la Isleta de San Juan, donde el activista social Tito Kayak subió hasta el mástil donde estaba la bandera de Estados Unidos y la reemplazó por la de Palestina.
En la vigilia participaron miembros de la comunidad árabe en Puerto Rico, así como de Colombia y República Dominicana, quienes expresaron su solidaridad con los palestinos, al igual que Jocelyn Velázquez, portavoz de la Jornada Se Acabaron las Promesas, nacida en 2016 al calor de la bancarrota de esta isla bajo el dominio colonial de Washington.
El régimen israelí de Benjamín Netanyahu lanzó, con el respaldo de Estados Unidos, despiadados bombardeos contra los habitantes de Gaza, que se cobraron la vida de más de nueve mil palestinos, casi la mitad de estos menores de edad, como respuesta a un ataque sorpresa el 7 de octubre del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), con un saldo de más de mil 400 muertos. “Trabajamos de manera colectiva en un mural comunitario en solidaridad con el pueblo palestino y su resistencia ante el genocidio que está sufriendo. Lleva décadas soportando actos imperialistas y coloniales”, expresó a Inter News Service la activista Shariana Ferrer-Núñez, cofundadora de la Colectiva Feminista en Construcción.
Ferrer-Núñez estableció un vínculo con la situación de opresión a que Estados Unidos somete desde hace 125 años a la población de Puerto Rico, que sirve de base de entrenamiento y de experimentos con armas.
La activista resaltó la relación con la ruta que transita Puerto Rico como nación caribeña ocupada y subordinada al poder imperial de un gran aliado dde Israel. “De las ruinas nacerán miles de semillas y serán libres Puerto Rico y Palestina”, establece una leyenda elaborada por una integrante de la Colectiva que describe el contexto político de los pueblos asediados por el colonialismo.
En este sentido Zoán Dávila, otra de las líderes de esa entidad, particularizó las ruinas “como aquello violentado al punto de su exterminio, en esta frase nombra un sitio donde había comunidad, viviendas, hospitales, escuelas y comercios”.
“Las ruinas, como aquello arruinado en Río Piedras, Puerto Rico, reflejan el abandono sistemática de comunidades empobrecidas; en Gaza, Palestina, es el resultado del bombardeo genocida por parte de Israel”, destacó.
La activista aclaró que, sin embargo, y pese a cualquier intento de liquidación, en ambos espacios emerge la vida, semillas de cambio que nacen de la resistencia y tenacidad de los pueblos que construyen y sobreviven.
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