Según las fuentes, vehículos aéreos no tripulados impactaron contra las instalaciones de las fuerzas norteamericanas ubicadas en el área de Tanef en el este de Siria cerca de la frontera con Jordania e Iraq.
Otros dos bombardeos con proyectiles apuntaron contra las bases de Tal Baidar al este de la provincia de Hasakeh y de Al-Omar ubicada en el campo petrolero del mismo nombre, en el este de la provincia nororiental de Deir Ezzor.
La autodenominada Resistencia Islámica en Iraq reivindicó las acciones y aseguró que los cohetes y drones impactaron contra los blancos fijados dentro de la base.
Los bombardeos con misiles y drones contra los objetivos de Estados Unidos en Siria se incrementaron notablemente desde el inicio de la guerra israelí contra la Franja de Gaza el pasado día 7 de octubre, y fueron reportadas al menos 30 incursiones.
El portavoz del Pentágono, el general Pat Ryder, admitió recientemente que un contratista murió y otros 21 soldados resultaron heridos en estas acciones.
Los ataques ocurren en medio de una escalada israelí contra los palestinos en la Franja de Gaza y después del envío de dos portaaviones por parte de Estados Unidos al mar Mediterráneo oriental, en medio de alertas sobre la regionalización del conflicto. Washington mantiene alrededor de 15 bases en territorio sirio sin el consentimiento del Gobierno de Damasco ni la aprobación de las Naciones Unidas.
Siria denunció repetidamente esta presencia, la que calificó de ocupación y aseguró que la actuación de los militares estadounidenses en Siria incentiva la actividad terrorista y apunta a desestabilizar el país y saquear sus riquezas.
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