Poseedor de una virtud que lo hizo transitar por varios géneros, el Premio Nobel de Literatura 1957 es considerado el máximo representante del existencialismo y una de las figuras intelectuales más importantes de Europa luego del fin de la II Guerra Mundial.
El también filósofo, periodista y dramaturgo nació en Argel, donde inició su etapa estudiantil, trabajó como periodista y actor, ligado a movimientos políticos de izquierda.
Publicó Bodas en 1939, conjunto de artículos que albergan reflexiones inspiradas en sus lecturas y travesías. Un año más tarde emprendió viaje a París, allí se desempeñó como redactor en Paris-Soir.
En esa época, su figura conquistó mayor notoriedad gracias a su novela corta El extranjero (1942), ambientada en Argelia, y el ensayo El mito de Sísifo (1942), piezas que reflejan la influencia del existencialismo en su vida.
Su novela La peste (1947) supone un cambio en su pensamiento, la idea de la solidaridad y la capacidad de resistencia humana frente a la tragedia de vivir se imponen a la noción del absurdo.
Camus trasladó su nueva visión a otros escritos como el ensayo El hombre en rebeldía (1951) y a relatos breves como La caída (1956) y El exilio y el reino (1957).
Con igual genialidad y talento creativo prestigian su carrera relevantes obras: El revés y el derecho (1937), Calígula (1944), El malentendido (1944), El hombre rebelde (1951), El verano (1954), entre muchas más.
A estas se suman su serie de crónicas periodísticas Actuelles y sus notas de diario escritas entre 1935 y 1942, publicadas en 1963 bajo el título de Cuadernos.
Albert Camus perdió la vida a los 46 años en un accidente automovilístico, convirtiéndose así en inspiración para muchos en el mundo, en quienes su legado permanece vivo desde el placer de hojear su vasta literatura.
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