Los investigadores lo identificaron a partir de huellas dactilares dejadas en un vidrio dañado de la fachada del edificio público.
Expertos de la PF también reconocieron al sujeto a partir de un video en el que aparece sentado en la silla de uno de los ministros de la Corte Suprema, en medio de la depredación del predio.
Las huellas digitales refuerzan la evidencia de su participación en la destrucción del patrimonio público.
El ciudadano vive en el municipio Ingeniero Beltrão, sureño estado de Paraná, donde la PF cumplió con una orden de detención preventiva y de búsqueda y captura en su contra.
Ante el tribunal superior, el acusado responderá por los crímenes de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, golpe de Estado, daño calificado, asociación criminal, incitación al delito, destrucción y deterioro o destrucción de bienes especialmente protegidos.
Las órdenes se cumplieron en la última fase de la llamada Operación Lesa Patria, que es permanente, con actualizaciones periódicas sobre el número de órdenes judiciales emitidas, personas capturadas y fugitivas.
Su arresto fue otro despliegue de la cruzada que comenzó el 20 de enero, con el objetivo de identificar personas que participaron, financiaron o ayudaron en los episodios antidemocráticos ocurridos en Brasilia el 8 de enero.
Por el momento, el juzgado superior condenó a 20 personas acusadas de los actos golpistas.
Bajo gritos de intervención militar y rechazo a la asunción al poder del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, partidarios extremistas de Bolsonaro invadieron y saquearon en esa fecha las sedes del Congreso Nacional, el STF y el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo.
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