«La política de la República Bolivariana siempre será la paz», subrayó el dirigente político en su tradicional rueda de prensa de los lunes.
Aseveró que ese espacio territorial de casi 160 mil kilómetros cuadrados, por trascendencia histórica, le pertenece a los venezolanos.
“No queremos guerra, para nada, la paz siempre”, acentuó.
Sobre el tema militar expresó que Guyana sería utilizada como sede de instalaciones de bases militares y auguró que “eso es lo que viene”.
Cabello denunció que en 2001 ó 2002 disfrazaron para instalar una base de lanzamiento de cohetes desde allí, a lo cual se opuso el comandante Hugo Chávez (1954-2013) y ellos desistieron de esa idea, “gracias a la fortaleza y argumentos” del líder bolivariano.
El también diputado a la Asamblea Nacional señaló que detrás de todas las maniobras del Gobierno de Guyana está la Exxon Mobil y las trasnacionales petroleras.
Denunció que esa empresa estadounidense es la que paga abogados de Guyana contra la República Bolivariana en la Corte Internacional de Justicia, pero también a ministros y tiene nóminas a su cargo, “un papel muy triste de un país de dirigentes que dependan de una trasnacional”.
Creer hoy día, a estas alturas, después de tantos países vivir pesadillas con el imperialismo que tiene buena fe de que van ayudar a Guyana, “eso no es de ingenuos, es de otra cosa”, afirmó.
Denunció que ese país vecino se convirtió en un Estado de la Exxon Mobil que “se hace allí lo que ellos quieran”, a fin de terminar el trabajo que comenzaron con el Laudo Arbitral de París de 1899.
Venezuela rechazó e hizo todo lo que le corresponde para que sea otorgado todo ese territorio en correspondencia con lo planteado en el Acuerdo de Ginebra de 1966, lo demás “son intereses financieros”, apuntó.
Al referirse al referendo consultivo del 3 de diciembre en defensa de la Guayana Esequiba, el dirigente del PSUV dijo que ese tema “nos atañe, compromete e involucra a todos los venezolanos”.
Expresó su seguridad en no tener dudas de que el pueblo responderá de manera afirmativa a las cinco preguntas de la consulta popular y con disposición a la defensa de un territorio que “históricamente le ha pertenecido a nuestro país”.
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