Esta postura difundida hoy por los medios de prensa sirios, fue expresada por el encargado de negocios interino de la Delegación Permanente de Siria ante las Naciones Unidas, Al-Hakam Dendi, en su intervención en el cuarto período de sesiones de la Conferencia sobre el establecimiento de una zona libre de armas nucleares y de otras armas de destrucción masiva en el Medio Oriente. Pidió a la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) que investigue el uso de este tipo de armas por parte de las fuerzas israelíes y que Tel Aviv rinda cuentas por su violación de las normas internacionales.
Asimismo, reiteró su llamado a la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) para que asuma sus responsabilidades y adopte todas las medidas necesarias para desvelar el programa nuclear militar secreto de Israel.
Este programa constituye una amenaza permanente a la paz y la seguridad internacionales, y hay que someterlo al sistema de salvaguardias amplias y los sistemas de control para las instalaciones y programas nucleares de la Agencia, afirmó el diplomático.
Consideró que la posesión por parte del régimen israelí de arsenales masivos de armas nucleares, químicas, biológicas y de destrucción masiva, con el apoyo de sus aliados Estados Unidos y otros países occidentales, ha aumentado la amenaza a la paz y la seguridad.
El delegado sirio dijo que la amenaza lanzada por uno de los ministros del gobierno israelí el día 5 de este mes de lanzar una bomba atómica contra Gaza constituye una nueva prueba de que Israel posee armas nucleares, y confirma lo que Siria ha advertido repetidamente.
Agregó que Damasco ratifica su llamado a la AIEA para que asuma sus responsabilidades y tome todas las medidas para desvelar el programa nuclear israelí y someterlo al sistema de salvaguardias integrales.
El paraguas de protección proporcionado por algunos países occidentales, sobre todo Estados Unidos, contribuyó a que Israel fuera el único estado en la región de Oriente Medio en poseer y desarrollar armas de destrucción masiva y negarse a someter sus instalaciones nucleares al control internacional, denunció.
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