Con la expansión dada desde hace par de años, este equipo de análisis reflejó la habilitación de 15 mil tiendas digitales que operan en el país y proyectó un comportamiento del comercio electrónico al cierre del año similar al del 2022.
El gerente de esa unidad José Castillo precisó que se trata de entre un 30 y un 40 por ciento de crecimiento a lo interno y en la parte internacional del 19 al 25 por ciento.
La venta únicamente de productos físicos evidenció un aumento de un 36 por ciento durante el período anual anterior contra 2021, lo cual representó unos 535 millones de dólares.
El comercio electrónico transfronterizo creció un 19 por ciento, equivalente a unos 261 millones de dólares, solo en las categorías físicas, según un cuarto estudio de la actividad elaborado por la unidad mencionada.
El fundador de Guatemala Digital Mario Porres refirió un crecimiento constante del sector y añadió que la competencia se está volviendo “más estrecha”.
Así, será beneficiosa para el cliente final, al obtener mejores precios y servicios, precisó el experto de esa compañía tecnológica aplicada a este segmento.
El bum del comercio electrónico de tiendas locales llegaría a representar este año alrededor de 700 millones de dólares, divúlgó antes la Cámara de Comercio.
Estas estadísticas incluyen solo productos físicos o tangibles, pero no servicios ni restaurantes, advirtió Castillo.
Aclaró que, aunque se quitaron las restricciones de movilidad por la pandemia de la Covid-19, ya es algo natural el escenario para quienes están en la dinámica del comercio electrónico.
Estudios indican, sin embargo, la necesidad de aprovechar este auge con estrategias integrales, como de parte de la oferta buscar mejoras al servicio, mayor inversión y capacitación.
El especialista del tema Jose Kont sugirió cinco líneas para aprovechar el contexto: ofrecer ventajas en precios en compras online, elegir soportes de pago más económicos, desarrollar iniciativas con beneficios de envío, entre otras.
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