La Comisión de Justicia de la Federación Peruana de Fútbol (CJ-FPF) dispuso el cierre del estadio Alejandro Villanueva e impuso a Alianza una multa equivalente a 26 mil 540 dólares.
El castigo se debe a que las luces de ese escenario fueron apagadas tras el juego del 8 de noviembre último, lo que impidió la celebración de los jugadores de Universitario y la ceremonia de entrega a este equipo del trofeo de campeón del año, título que Alianza obtuvo en 2021 y 2022.
El corte del fluido eléctrico puso en riesgo a decenas de miles de espectadores si se desataba el pánico, aunque ello no ocurrió.
Inicialmente, el club anfitrión alegó que el apagón habría sido orientado por la Policía, que lo desmintió, y posteriormente argumentó que la iluminación fue cortada para evitar disturbios, lo que no logró credibilidad.
El administrador del estadio aliancista, José Sabogal, admitió finalmente haber cortado la luz e insistió en sostener que fue una medida de seguridad.
El informe de la sanción no precisa si la suspensión es absoluta o solo para los partidos del campeonato de 2024, lo cual permitiría que Alianza juegue en su estadio los partidos de local de la Copa Libertadores, torneo suramericano interclubes.
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