Milei -quien con esta movida fue despejando dudas acerca de cuáles son sus prioridades- dijo a los periodistas a la salida de la mansión ejecutiva que fue un intercambio de opiniones «excelente» en el que hablaron «sobre las condiciones económicas y sociales en Argentina en este momento».
Su oficina informó en la red social X que el futuro mandatario “expresó durante el encuentro su mirada sobre la agenda geopolítica internacional alineada con Occidente y su defensa de los valores de la libertad”.
En la reunión participaron también Juan González, asistente Especial del Presidente y director Principal del Consejo Nacional de Seguridad para el Hemisferio Occidental, y Brian Nichols, subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental; además estuvo Marc Stanley, embajador de Washington en Buenos Aires.
El líder del partido de ultraderecha la Libertad Avanza, en Nueva York se dirigió a un lugar sagrado para el judaísmo, que había visitado con anterioridad cuando pidió por su elección y al parecer, ahora vino a agradecer porque se cumplió “el deseo”.
Igualmente dialogó con el expresidente William Clinton y Chris Dodd, exsenador demócrata, y asesor especial para las Américas del mandatario Joe Biden.
Milei, quien fue el candidato más votado en la segunda vuelta de las elecciones generales argentinas frente a Sergio Massa, de Unión por la Patria, asumirá el cargo el próximo 10 de diciembre, el mismo día en que se cumplen 40 años del retorno de la democracia al país suramericano, o sea, cuatro décadas después de la toma de posesión de Raúl Alfonsín en 1983.
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