Los delanteros Raheem Sterling al minuto 75 y Harry Kane (86) definieron el partido para los pupilos de Gareth Southgate, quienes el sábado enfrentarán al ganador del duelo de este martes entre Suecia y Ucrania.
En la parte inicial del partido, los germanos salieron con ímpetu y tuvieron en Toni Kroos y León Goretzka a sus dos principales figuras al frenar los intentos ingleses de dominar el balón.
Gracias a la presión en el medio del campo los visitantes armaron la primera oportunidad en las botas de Goretzka.
Un potente disparo de Raheem Sterling desde lejos, desviado por el portero Manuel Neuer provocó la reacción de los ingleses, quienes apoyados en el juego del inquieto Bukayo Saka frenaron el empuje germano.
Animados por la afición, Inglaterra tomó el control del encuentro y amenazó sobre todo en centros desde los costados, que nunca conectaron con Kane.
Tras el descanso, Alemania trató de dominar el desafío en el arranque de la parte complementaria, pero no encontró la forma de hacer daño ante los entonados centrales de los Three Lions.
Lo intentó Havertz, el más inspirado del ataque teutón, con una volea desde dentro del área tras un rechace, pero el meta Jordan Pickford consiguió desviar el balón.
Ya en la recta final, el recién entrado Jack Grealish abrió muy bien a la entrada por banda de Luke Shaw y este habilitó a Sterling, el único inglés en anotar en toda la Eurocopa (tres goles con el de hoy).
Alemania dispuso de una buena falta al borde del área por una entrada sobre Joshua Kimmich y un excelente pase de Havertz para Thomas Muller fue desaprovechado por el delantero del Bayern de Múnich.
De nuevo apareció Grealish para habilitar desde dentro del área, en una jugada similar a la del primer tanto, a un Kane quien por fin vio puerta en la justa continental.
La selección teutona cierra la era del técnico Joachim Low con una nueva decepción después de caer en primera fase de la Copa Mundial de Rusia 2018.
mem/am/gdc
