También testificaron el martes ante un comité de la Cámara de Representantes, liderado por los republicanos, sus homólogas del Instituto de Tecnología de Massachusetts, doctora Sally Kornbluth, y de la Universidad de Harvard, doctora Claudine Gay.
Las directivas fueron criticadas antes por no haber hecho lo suficiente para supuestamente garantizar la seguridad de los estudiantes judíos y de otras personas en las respectivas facultades.
Sin embargo, los criterios más fuertes de donantes, políticos, exalumnos y líderes empresariales recayeron en Magill, incluso después de que intentara aclarar el miércoles el contenido de sus palabras sobre los judíos y el genocidio.
Un grupo bipartidista de más de 70 miembros del Congreso envió una carta a los miembros de las juntas directivas de la Universidad de Pensilvania, Harvard y MIT exigiendo la destitución de Magill, Gay y Kornbluth.
El panel de la Cámara Baja también anunció el jueves que investigará las políticas y procedimientos disciplinarios en esos centros, tras la audiencia reciente.
La Universidad de Pensilvania es una de las siete bajo investigación federal por acusaciones de antisemitismo o islamofobia, en medio de la guerra declarada al Movimiento de Resistencia Islámica Hamas en Gaza el pasado 7 de octubre, un tema que resulta divisivo aquí.
Magill ocupó el cargo desde el 1 de julio de 2022 y antes se desempeñó como vicepresidenta ejecutiva y rectora en la Universidad de Virginia.
npg/dfm