Dicho documento contiene una enorme cantidad de mentiras, falacias y acusaciones dirigidas a varios países, incluida Siria, cuyo pueblo sigue sufriendo las consecuencias del terrorismo apoyado por el propio Washington y sus aliados, denunció un comunicado de Cancillería.
Denunció que las sucesivas administraciones estadounidenses emplean el terrorismo como una herramienta al servicio de sus planes y objetivos políticos y militares en la región y el mundo.
Estos gobiernos han utilizado los lemas de lucha anti-terrorista, democracia y derechos humanos para dividir el mundo en ejes y aislar a los países y pueblos y socavar sus opciones nacionales, fustigó el Ministerio.
Indicó que, durante más de diez años, Washington atizó la guerra terrorista contra Siria, y financió y armó a organizaciones y entidades terroristas proscritas en la lista de terrorismo del Consejo de Seguridad, especialmente “Daesh” y “Frente al-Nusra, además de apoyar las milicias terroristas y separatistas.
Aclaró que Damasco mantiene su firme posición adoptada desde 1986, que exige establecer una definición clara y específica del terrorismo y evitar cualquier intento estadounidense-israelí de confundir este flagelo con el derecho de los pueblos a resistir la ocupación extranjera y conservar su soberanía, libertad y autodeterminación.
Concluyó su comunicado con enfatizar que el cínico apoyo de EEUU al terrorismo israelí es un flagrante ejemplo de la hipocresía de las administraciones estadounidenses e instituciones vinculadas con el ocupante sionista.
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