Luego de la pandemia las ventas al extranjero experimentaron un rápido ascenso y lograron recuperar las cifras perdidas durante la crisis sanitaria. Sin embargo, el sector espera una moderación del crecimiento en 2024, señaló el reporte.
La industria relojera suiza es considerada una de las motores en ventas al extranjero del país centroeuropeo, cuyo destino fundamental fue Estados Unidos con compras por valor de cuatro mil 400 millones de euros, un alza del 6,6 por ciento más que en 2022.
Agrega el reporte que en 2023 la plantilla del sector superó los 65 mil empleados, dato que no se alcanzaba desde hacía medio siglo cuando el auge de los relojes de cuarzo supuso cierta crisis a la tradicional industria helvética.
El 95 por ciento de su producción se dirige a mercados exteriores, y ello lo vulnerable a la situación geopolítica internacional y los vaivenes de los mercados de divisas. En Suiza, las exportaciones de relojes ocupan el tercer lugar, antecedido sólo por la maquinaria y los productos farmacéuticos.
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