Un comunicado del secretario general, António Guterres, recordó que las agresiones contra el personal y las instalaciones de la ONU están prohibidos por el derecho internacional.
El texto envió condolencia a la familia y colegas de la víctimas así como al Gobierno y pueblo de Somalia al tiempo que les expresó la solidaridad y el apoyo de las Naciones Unidas en su lucha contra el terrorismo.
Guterres reafirmó el compromiso de la Organización de apoyarlos en su viaje hacia un país estable, seguro y próspero.
Por su parte, Catriona Laing, representante especial de la ONU para Somalia, recordó el papel crucial de la Unidad de Guardia de la organización para garantizar la seguridad del personal involucrado en apoyar la paz y la construcción de Somalia.
La enviada condenó el hecho mientras que la Misión del organismo en el país africano pidió que los responsables comparezcan ante la justicia.
La representación de la ONU sigue comprometida con apoyar al pueblo y al Gobierno de Somalia en sus esfuerzos por construir la paz y la estabilidad en el país.
De acuerdo con la Misión, varias ráfagas de mortero, presuntamente lanzadas por el grupo militante Al-Shabaab, impactaron el jueves en la zona del Aeropuerto Internacional Aden Adde.
El ataque causó la pérdida de un miembro de la Unidad de Guardia de la ONU así como daños a la infraestructura en los alrededores.
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