Mediante un comunicado, la APG pidió libertad para realizar su labor durante el acto solemne del traspaso de mando del binomio presidencial conformado por Bernardo Arévalo y Karin Herrera.
Señaló que en dicho acto “se ha visto un total irrespeto al acceso a la información pública, lo cual no puede ser limitado por ninguna autoridad, como sucede en estos momentos”, acotó.
Ejemplificó con el impedimento de entrar al Congreso y al Teatro Nacional Miguel Ángel Asturias, “lo cual viola flagrantemente la Constitución Política de la República, en su artículo 35”, enfatizó.
La APG reiteró su compromiso con la defensa de la libertad de prensa y “su mandato que nos compromete a velar por la Libre Emisión del Pensamiento, un derecho ciudadano que no puede ser restringido por persona alguna o autoridad”, insistió.
El artículo 35 constitucional garantiza los derechos y obligaciones para ejercer el periodismo en Guatemala, retomó.
Exhortó, por tanto, a respetar la cobertura de dichos eventos que son parte del proceso democrático de traspaso del mando y constituyen un derecho de la sociedad a mantenerse informada.
“Estas agresiones, además de impedir el libre acceso a la información de los periodistas, constituyen un delito”, planteó.
Instó en consecuencia a las fuerzas de seguridad para que actúen conforme el ordenamiento jurídico y que no violen un derecho constitucional que se debe respetar en toda democracia.
Recordó que ninguna autoridad, cívico militar, está obligada a acatar órdenes ilegales.
Este domingo Arévalo debe asumir el cargo, pero la sesión solemne del Congreso está retrasada y se aplazó a su vez para las 16:00, hora local, la ceremonia de transición de mando prevista en el Centro Cultural Miguel Ángel Asturias.
Cientos de autoridades ancestrales y organizaciones sumadas se dirigen del capitalino Parque Central al Congreso en reclamo de que se cumpla con la juramentación del nuevo presidente.
Pidieron a la población que sea pacífica y llamaron a las fuerzas de seguridad a no agredir a los manifestantes.
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