Un día como hoy, en 1960, durante la conmemoración del vigésimo aniversario de la Sociedad Espeleológica de Cuba, el líder histórico de la Revolución cubana, Fidel Castro, hizo un discurso histórico en el que acentuó: «El futuro de nuestra patria debe ser necesariamente un futuro de hombres y mujeres de ciencia, de hombres y mujeres de pensamiento».
Recordó en su disertación el consejero de la Embajada de Cuba en Brasil, Melne Martínez, y
precisó que esa fecha fue elegida para conmemorar el Día de la Ciencia cubana, justamente porque, a partir de ese momento, hubo un cambio de paradigma.
«Un país pobre, pequeño, del llamado Tercer Mundo, desafiaría teorías y entraría en el desarrollo de las ciencias más avanzadas y conquistar el éxito», señaló.
A partir de ese momento, apuntó el diplomático en un teatro del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, «las políticas de la Revolución reforzaron los esfuerzos para el desarrollo de la ciencia en Cuba».
Tras las palabras de Martínez se transmitió un audiovisual sobre la Ciencia cubana y la ministra del sector, Elba Rosa Pérez, ratificó el compromiso de su país de promoverla como motor del desarrollo sostenible e inclusivo.
Al intervenir en la velada, Inácio Arruda, secretario de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo Social de Brasil, aplaudió la retomada de conversaciones y acuerdos entre ambas carteras de los dos países tras la llegada al poder del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
«Brasil tiene mucho interés en intercambio de experiencias con Cuba en el área de biotecnología, vacunas y medicamentos. Es de gran interés para Brasil que nosotros podamos cooperar con Cuba», afirmó Arruda, quien aprovechó además para impugnar el bloqueo de Estados Unidos contra la isla por más seis décadas.
En la jornada, el profesor Tirso Sáenz, exviceministro de Industrias y exvicepresidente primero de la Academia de Ciencias de Cuba, rememoró pasajes de cómo se llegó a establecer la fecha de la Ciencia cubana.
Hizo referencia al médico y científico cubano Carlos J. Finlay, quien descubrió la transferencia de enfermedades por agentes biológicos, aplicándola a la fiebre amarilla, transmitida por la hembra fecundada del mosquito Aedes aegypti.
Destacó la impronta visionaria de Fidel Castro sobre los hombres de ciencia y el pensamiento del comandante argentino cubano Ernesto Che Guevara acerca de su concepción del hombre nuevo, como nueva perspectiva de la humanidad.
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