A nivel ministerial, el documento fue ratificado por 30 países del área, en el esfuerzo común para eliminar el hambre y reducir la malnutrición, reveló aquí un comunicado de prensa de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Representantes gubernamentales de los 30 Estados examinaron el tema en un reciente encuentro presencial y virtual, promovido por la oficina regional de la FAO en la capital de Chile.
Los ministros participantes en el foro validaron de forma unánime el nuevo Plan de Seguridad Alimentaria y Nutricional y Erradicación del Hambre 2030, cuyo proceso de elaboración comenzó en enero de 2023 a solicitud de los jefes de Estado y de Gobierno de los países integrantes de la organización.
Además de la asesoría técnica de la FAO, la iniciativa contó con el aporte de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi), y el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA).
Al decir de la fuente, este documento regional ayudará a avanzar hacia “sistemas agroalimentarios más inclusivos, eficientes, resilientes y sostenibles”.
El plan, abundó, ofrece lineamientos generales para orientar a los países en la implementación de los componentes más específicos y operativos, en línea con su contexto local.
En opinión del subdirector general y representante regional de la FAO para América Latina y el Caribe, Mario Lubetkin, se trata de una “respuesta articulada” al impacto de diferentes eventos y desafíos que enfrenta la región.
Al frente de la Celac, San Vicente y las Granadinas destacó la importancia de pasar del acuerdo a la acción y la disposición de colaborar con Honduras, que asumirá la próxima presidencia pro tempore del bloque.
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