Los agentes acudieron a la ciudad paulista de Barueri para identificar a las personas que planearon, financiaron e incitaron los episodios antidemocráticos.
Tales órdenes son un complemento de la fase 23 de la llamada Operación Lesa Patria, iniciada en los días siguientes a los hechos de terrorismo en la capitalina Explanada de los Ministerios, y se cumplieron solo en esta fecha por conveniencia de investigación.
En teoría, las acciones indagadas constituyen crímenes de abolición violenta del Estado Democrático de Derecho, golpe de Estado, asociación criminal e incitación al crimen.
Las investigaciones continúan en curso y la Operación Lesa Patria es permanente, con actualizaciones periódicas sobre el número de órdenes judiciales expedidas y personas capturadas.
En balance publicado a principios de año, la PF informó que cumplió 97 órdenes de detención preventiva y 313 de búsqueda y captura. Con el despliegue de este miércoles, la cifra de búsquedas pasa a 316.
La cruzada tuvo 23 fases y realizó mil 393 arrestos en flagrante en el transcurso de los eventos del 8 de enero de 2023.
En la 23 fase de la Operación Lesa Patria, la PF cumplió 47 órdenes judiciales (46 de búsqueda y captura, y una de prisión preventiva), expedidas por el Supremo Tribunal Federal (STF).
Los mandatos se cumplieron en Rio Grande do Sul, Bahia, Mato Grosso, Goiás, Minas Gerais, Maranhão, Paraná, Rondônia, Sao Paulo, Tocantins, Santa Catarina y el Distrito Federal.
De acuerdo con el comunicado de la fuerza del orden público, se «determinó la indisponibilidad de bienes, activos y valores de los investigados».
Se averigua también que los valores de los daños causados al patrimonio público el 8 de enero de 2023 puedan llegar a la cifra de 40 millones de reales (unos ocho millones de dólares).
La última acción, la 22 fase, ocurrió en noviembre de 2023, con 25 órdenes de búsqueda e incautación y tres de prisión preventiva, también expedidos por el STF, en Santa Catarina y Minas Gerais.
El 1 de enero de 2023, una semana después que el extornero mecánico Luiz Inácio Lula fuera investido presidente de Brasil, un hormiguero de adeptos radicales de su predecesor, el político ultraderechista Jair Bolsonaro, invadieron y saquearon el Congreso Nacional, el STF y el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo.
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