De acuerdo con el funcionario, exponerse directamente al sol durante las horas de mayor radiación puede causar desde leves quemaduras en la piel hasta daños graves para personas vulnerables.
El denominado golpe de calor puede afectar a cualquier individuo, señaló, pero de manera especial a quienes están en situación de riesgo como adultos mayores, pacientes con enfermedades crónicas o niños de corta edad.
Problemas como calambres, hinchazón generalizada, pérdida del conocimiento y descompensación en diabéticos e hipertensos pueden estar asociados a la deshidratación, aseguró.
Una amplia zona comprendida desde Valparaíso y la Región Metropolitana de Santiago hasta el Biobío en el sur permanece bajo alerta, debido al pronóstico de temperaturas máximas de 35 grados Celsius, que seguirán hasta el fin de semana.
García señaló que si es imprescindible estar al sol, debe utilizarse gorra o sombrero, mejor si es de alas anchas, cubrir la mayor cantidad posible de superficie del cuerpo, llevar anteojos oscuros y aplicarse protector.
En lo posible, recomendó hacer las actividades temprano o por la tarde cuando baja el calor y recordó que cuando se rebasan los 35 grados, el ventilador no refresca porque mueve aire caliente. En esos casos lo mejor es tener a mano paños frescos o ducharse con agua fría.
Enfatizó que por ninguna razón debe dejarse a niños pequeños o mascotas encerrados en autos o espacios pequeños, porque la temperatura se concentra y puede causar daños graves.
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