«China siempre concede gran importancia a la facilitación de la llegada de extranjeros, incluidos ciudadanos japoneses», subrayó el portavoz Wang Wenbin.
Según el vocero, Beijing estudiará seriamente el llamado de varios sectores de la nación nipona a favor de la reanudación de la política de exención de visado.
«Esperamos que Japón trabaje con China para mejorar conjuntamente la facilitación de los intercambios de personal entre las dos partes», agregó.
Previo a la pandemia, los ciudadanos japoneses con pasaportes ordinarios tenían acceso a China sin visado para negocios, viajes, visitas a familiares o tránsito, siempre que su estancia no superara los 15 días.
En los últimos meses el gigante asiático aprobó políticas de exención de visado con varios países como parte de la apertura de alto nivel que fomenta el gobierno.
Tailandia y China firmaron esta semana un acuerdo sobre supresión de visas en aras de facilitar los viajes de negocios y el turismo entre los dos países.
Poco antes Beijing acordó una política similar con Singapur con el mismo objetivo: alentar los intercambios turísticos.
Además, China implementó el mes pasado a modo de prueba una medida unilateral de exención de visado para los titulares de pasaportes ordinarios de Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, España y Malasia.
La política es efectiva desde el 1 de diciembre de 2023 y hasta el 30 de noviembre de 2024, tiempo durante el cual estas personas podrán ingresar al gigante asiático sin visa para actividades de negocios, turismo, visitas a familiares y amigos y tránsito, por no más de 15 días.
mem/idm