Mediante una declaración, reafirmó la continuación de sus operaciones contra las fortalezas enemigas y el enfoque de resistencia a las fuerzas de ocupación norteamericanas en Iraq y la región; así como el rechazo a las masacres cometidas por la entidad israelí en Gaza.
En este contexto, las Fuerzas de Movilización Popular reafirmaron su disposición para cumplir cualquier orden emitida por el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, para preservar la soberanía y la integridad territorial de la nación, tras la reciente agresión estadounidense.
Ante el ataque de Washington a las regiones de Akashat y Al-Qaim, las Fuerzas señalaron que la acción estadounidense es una violación flagrante de la soberanía del Estado iraquí y un atentado contra sus instituciones de seguridad oficiales.
En una declaración relacionada, el portavoz del movimiento Al-Nujaba, Hussein al-Moussawi, afirmó que la agresión es una parte integral del intento de Estados Unidos de encubrir su fracaso después de perder su rumbo en la región.
Además, refutó las afirmaciones de la Casa Blanca de que informó al gobierno iraquí sobre los ataques, calificándolas como una manipulación de la opinión pública e intento de desestabilizar las instituciones de seguridad del país.
En este sentido, el líder de la alianza Nabni en Iraq, Hadi al-Ameri, insitió que el ataque aéreo de Estados Unidos demostró que su enfoque agresivo está abierto en todos los frentes.
De acuerdo con cifras del gobierno iraquí, las incursiones norteamericanas en la noche y madrugada provocaron la muerte de 16 ciudadanos, 25 heridos y pérdidas en edificios residenciales.
rgh/yma