Una investigación realizada por el Centro de Estudios Turísticos de este país, presentado durante el evento Italy for Weddings (Italia para Bodas), muestra que también se estableció en el pasado año un récord en las facturaciones derivadas de esa modalidad turística, con 803 millones de euros, un 34,0 por ciento más que lo recaudado en 2022.
En relación con los países de origen de las parejas que decidieron casarse en esta nación europea, mantienen la primacía las de Estados Unidos, con un 31,0 por ciento del total, seguidas de las británicas, alemanas, australianas, canadienses, indias, chinas y mexicanas, mientras aumentaron las procedentes de Singapur e Indonesia.
Uno de los datos de mayor interés, revelados en esta pesquisa, se refiere a la presencia turística estrechamente vinculada a esas celebraciones, pues las pernoctaciones de los participantes en las mismas se estimaron en más de 2,4 millones, para un ascenso del 19,5 por ciento en relación con las del año previo.
El 60,0 por ciento de esos eventos contó con un número de invitados de entre 51 y 100 personas y el promedio se calculó en 60,7 asistentes, lo cual contribuyó al aumento de la facturación en el sector.
El gasto también se incrementó y el costo promedio de estas ceremonias fue de 59 mil euros, frente a los 53 mil 800 registrados en 2022, mientras disminuyeron los eventos incluidos en las tres primeras franjas presupuestarias, de entre 10 mil y 50 mil euros, con una cuota del 35,0 por ciento destinada a alimentos y bebidas.
Los expertos de ese centro consideraron que en 2024 continuará creciendo esa modalidad turística, aunque solo un 8,8 por ciento, con mil 200 eventos más que los realizados el año anterior, y se prevé un aumento de las denominadas Semanas de Bodas, con la prolongación de las celebraciones durante varios días, agrega la fuente.
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