Sin embargo, la comunidad científica y universitaria fue un pilar fundamental para sobrellevar la pandemia de Covid-19, que ahora parece apaciguarse en el país, contrastó el académico en observaciones al semanario Brecha.
El recorte sufrido en el Plan Estratégico de Desarrollo de Udelar representa una baja presupuestal de casi el seis por ciento para el presente año, mientras que la población universitaria subió un 12 por ciento en 2021, y esta ecuación significa menos recursos para más estudiantes.
Arim manifestó que ‘es muy inquietante desde el punto de vista del desarrollo, del conocimiento y de la cultura general’ y reafirmó la necesidad de contar con estos medios para que científicos tanto uruguayos como extranjeros puedan profundizar sobre la materia en el país.
El alto centro de estudios propuso la creación de un instituto de investigación de vacunas enfocado en la salud humana y animal que sea ‘capaz de completar el recorrido desde la investigación hasta la producción a escala piloto, cumpliendo con las fases de investigación preclínica y clínica’, según explica en documento.
Consultado al respecto, el decano de la Facultad de Química, Álvaro Mombrú, comentó que la emergencia sanitaria despertó esa necesidad en potenciar la investigación con alto énfasis en el trabajo interdisciplinario, de inmunólogos, microbiólogos, química médica, bioprocesos y bioinformática, entre otras especialidades.
Según estimaciones de Arim, para el proyectado instituto se requerirán 15 millones de dólares a ejecutar escalonadamente hasta 2025, ‘caro para la Universidad, pero no para el país’.
Ejemplificó entre los únicos centros latinoamericanos de ese género, los de Argentina, Brasil y Cuba, donde su Instituto Finlay de Vacunas creó las candidatas Soberana 01, Soberana 02 y Soberana Plus para enfrentar la Covid-19.
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