Después de más de un lustro de gestiones, consultas y acuerdos, recibieron el aval Amerador S.A. (Trebolac), Disar S.A. Planta el Tejar (Sarita), Helados de Centroamérica S.A. (Dos Pinos) y Productos Lácteos de Centroamérica S.A. (LALA), subrayó una fuente oficial.
Según informó el Ministerio de Economía y Planificación local, el pacto se logró en sintonía con lo establecido en el Reglamento Centroamericano sobre Medidas y Procedimientos Sanitarios y Fitosanitarios.
Participaron además en las pláticas, agregó, las carteras de Salud y Asistencia Social, así como Agricultura, Ganadería y Alimentación de este territorio.
En 2018, recordó, Honduras impidió el ingreso de productos chapines derivados de la leche debido a un compromiso asumido por la mayoría de los países de la región.
La normativa establece que las plantas de producción exportable deben ser inspeccionadas y certificadas por las autoridades de la nación de destino.
Datos de la Asociación de Desarrollo Lácteo (Asodel) dan cuenta que la producción lechera en Guatemala genera más de 150 millones de dólares al año, en beneficio principalmente del área rural y emprendimientos liderados por mujeres.
Las fincas productoras de ese líquido superan las 14 mil, de ellas 800 formales, parte de 16 empresas que obtienen de cinco mil a 200 mil litros de leche por día.
La zona tradicional de desarrollo lácteo de Guatemala es el altiplano central (departamento Chimaltenango y Guatemala zona San José Pínula), la zona sur oriental (Santa Rosa, Jutiapa y Jalapa) y Costa Sur (Escuintla y Suchitepéquez).
También, existen cuencas en el centro de Alta Verapaz, Zacapa y Chiquimula, con posibilidades proyectadas de crecimiento en en Izabal, norte de Alta Verapaz y Sur Oriente de Petén.
Directivos del sector lácteo del país indicaron las potencialidades para producir más, pero reclamaron apoyo para incentivar el consumo nacional y abrir mercados internacionales.
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