En un comunicado oficial emitido este jueves, se cuestiona que la nación europea pretenda erigirse juez anticorrupción, mientras de forma ilegal se roba los activos de Venezuela en contubernio con la extrema derecha nacional.
Refiere que tales acciones deben ser juzgadas ante las cortes internacionales, debido a que las mismas han afectado la salud del pueblo venezolano e imposibilitado la compra de materiales y medicinas para enfrentar la pandemia de la Covid-19.
El texto, expresa además que la imposición de sanciones a ciudadanos que se dedicaban a facilitar el acceso a la alimentación del pueblo sorteando los obstáculos del bloqueo de Estados Unidos, es un acto criminal encaminado a dañar a esta nación suramericana.
El comunicado termina señalando que Venezuela seguirá denunciando ante la comunidad internacional la ‘descarada actuación del Gobierno británico, cuyas actuales actuaciones no se alejan de la de sus corsarios y piratas, siempre codiciando los recursos ajenos, al margen del Derecho Internacional y la civilidad’.
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