Así advirtió la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), que contribuye actualmente en la realización de evaluaciones sobre el terreno y la entrega de asistencia como alimentos, refugio y atención médica.
Según informó el vocero del secretario general de la ONU, Stéphane Dujarric, más de la mitad de la población yemenita se enfrenta a niveles críticos de inseguridad alimentaria y cinco millones de personas están a un paso de la hambruna.
A medida que el valor de la moneda del país cae en picada, el precio de los alimentos aumenta y los artículos básicos resultan inaccesibles para millones, señaló.
En el contexto del conflicto, las graves necesidades humanitarias y la amenaza de hambruna, los casos de Covid-19 subieron en Yemen durante los últimos días, indica el sitio oficial de noticias de la ONU.
Hasta ahora, añade, se han administrado poco más de 310 mil vacunas en esa nación: esto significa que solo el uno por ciento de la población ya recibió su primera dosis.
El Plan de Respuesta Humanitaria de la ONU para Yemen está actualmente financiado en un 47 por ciento: cuenta con mil 820 millones de dólares de los tres mil 850 millones requeridos, pero la mayor parte del dinero se agotará en septiembre.
Por ello, las agencias de ONU destacan la urgencia de fondos adicionales y predecibles con el fin de mantener la asistencia dirigida a las personas más vulnerables.
Yemen padece una de las peores crisis humanitarias del mundo debido, en gran medida, al conflicto que enfrenta a tropas gubernamentales con rebeldes hutíes. La crisis escaló en 2015 con el comienzo de bombardeos de una coalición antiinsurgente liderada por Arabia Saudita.
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