El mandatario resaltó el lugar 14 en el medallero general y en las palabras de bienvenida expresó la gratitud y la admiración por las hazañas logradas de los atletas en los escenarios de competencias.
Acompañado por miembros del gobierno, el también primer secretario del Partido Comunista de Cuba significó la actuación de los deportistas que superaron déficit de competencias, problemas familiares y limitaciones en los entrenamientos.
Díaz-Canel destacó en sus palabras el coraje, la valentía y el compromiso de cada exponente cubano, ‘protagonistas de una gran alegría para el pueblo pues cada título levantó el orgullo nacional’.
El jefe de Estado calificó las actuaciones de derroche de cubanía, al tiempo que preponderó que pese al bloqueo y al asedio, los deportistas nacionales realizaron en Tokio su mejor desempeño de los últimos cuatro Juegos Olímpicos.
Durante el intercambio, el presidente agradeció la entrega y el sacrificio de los deportistas y felicitó particularmente al luchador Mijaín López, a quien tildó de leyenda luego de conquistar su cuarto cetro dorado en citas bajo los cinco aros.
También, reconoció los oros del boxeo y el canotaje, así como las preseas de Leuris Pupo (plata-tiro deportivo) e Idalys Ortiz (plata-judo) y de todos los medallistas antillanos en Tokio.
La delegación de la nación caribeña terminó en la lid nipona con siete preseas doradas, tres de plata y cinco de bronce, para situarse en el lugar 14 del medallero y superar las actuaciones de Río 2016, Londres 2012 y Beijing 2008.
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