En la sesión de este miércoles ese grupo acordó fusionar seis proyectos presentados sobre el mismo tema por diputados de diferentes bancadas, de los cuales tres plantean retirar el 10 por ciento de los fondos y los otros tres el total de dinero ahorrado.
Esa fusión de los textos de deberá ser aprobada mañana por el pleno de la Cámara para continuar con su tramitación que pudiera retomarse a comienzos de septiembre.
Al finalizar la jornada la diputada comunista Karol Cariola declaró a la prensa que este cuarto retiro es necesario porque ‘la situación económica de las familias es de acumulación de deudas y compromisos que no han podido asumir’ y que la bancada de su partido la apoyará.
El trámite legislativo será largo y, según explicó el diputado Marcos Ilabaca, presidente de la comisión, el análisis se prolongará por unas tres semanas para luego pasar al pleno de diputados, y posteriormente ser visto el asunto en otras comisiones y que finalmente el Senado refrende el documento resultante.
De ser aprobado, sería la cuarta oportunidad en que millones de trabajadores chilenos pueden emplear sus ahorros depositados en las empresas privadas aseguradoras de fondos de pensiones (AFP), para enfrentar con sus propios medios la crisis económica causada por la pandemia de Covid-19.
Como en los casos anteriores, la iniciativa enfrenta un fuerte rechazo del Gobierno, que en esta oportunidad insiste en considerarla innecesaria luego que se aprobara la entrega de un Ingreso Familiar de Emergencia, el cual según La Moneda, beneficia a 15 de los 19 millones de chilenos.
Los anteriores retiros fueron apoyados incluso por parte de los legisladores del oficialismo ante los bajos montos de las ayudas del gobierno, que además llegaban tardíamente e incluían gran cantidad de requisitos que dejaban fuera a miles de personas.
Incluso políticos de oposición y economistas señalaron que la reticencia del Gobierno de Sebastián Piñera obedecía sobre todo al interés por proteger a las AFP, consideradas emblemáticas del muy excluyente modelo neoliberal imperante.
Según datos oficiales, los tres primeros retiros pusieron en circulación en conjunto casi 49 mil millones de dólares atesorados por las AFP, que contrario a las predicciones catastrofistas del gobierno, estimularon el consumo interno y redujeron en varios puntos porcentuales la fuerte contracción de la economía provocada por la pandemia.
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