Zhao Lijian, vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, dijo que su Gobierno está conmocionado por las acciones ocurridas la víspera cerca del aeropuerto de Kabul, con saldo de al menos 103 personas, entre ellos 72 civiles afganos y 13 militares de Estados Unidos.
Instó a los talibanes a honrar su promesa de romper vínculos con cualquier organización terrorista, combatir al Movimiento Islámico del Turkestán Oriental y dar solución a los problemas que obstaculizan el mantenimiento de la paz regional y el desarrollo de la cooperación.
Según recordó Zhao, el Talibán aseguró a China que no le permitirá a ninguna fuerza entrar al gigante asiático desde Afganistán, amenazar su seguridad nacional ni la vida de los ciudadanos.
Las explosiones ocurrieron este jueves en las afueras del aeropuerto internacional de Kabul, escenario de caos y estampidas porque muchas personas intentan escapar tras el ascenso al poder este mes de los fundamentalistas radicales.
Dichas acciones lo realizaron terroristas suicidas y fue reivindicado por la rama de ISIL (ISIS) en Afganistán, el Estado Islámico en la provincia de Khorasán.
A raíz de la entrada del Talibán a Kabul, China dijo que ‘continuará apostando por relaciones de buena vecindad, de cooperación y amistad’ con la nación centroasiática y remarcó el apego a los principios de no injerencia en sus asuntos internos.
Su embajada opera con normalidad y las empresas presentes en Afganistán se preparan para ampliar las inversiones una vez que comience la reconstrucción.
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