En un comentario tras concluir el rezo dominical del Ángelus ante feligreses congregados en la Plaza de San Pedro, el sumo pontífice señaló que ‘ruego que muchos países reciban y protejan a quienes buscan una nueva vida’ y por ‘los desplazados internos, para que reciban la asistencia y protección necesarias’.
En ese sentido, abogó a favor de que los jóvenes afganos reciban educación, aspecto que calificó como ‘un bien esencial para el desarrollo humano’ y porque todos los oriundos de aquella nación centroasiática puedan vivir con dignidad, en paz y fraternidad con sus vecinos, en su país, en tránsito o en las naciones de acogida.
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