Con anterioridad comenzó también la producción a gran escala de Soberana 02, la propuesta antiCovid-19 del Instituto Finlay de Vacunas(IFV), el ensayo clínico más avanzado de las cuatro propuestas de la isla, que debe arrancar con su tercera fase el 1 de marzo.
De esta manera el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), líder del candidato vacunal Abdala se une al escalado productivo del inyectable.
La idea, al igual que con Soberana 02, es proveer de suficientes dosis de la molécula para dar continuidad a esa próxima etapa del ensayo clínico con más número de voluntarios para comprobar eficacia, y ampliarlo después al resto de la población.
Según sus desarrolladores, Abdala demostró en fase II seguridad e inmunogenicidad contra la Covid-19, mientras, dos meses antes al dar inicio la fase I, los científicos comprobaron de manera favorable su perfil de seguridad y reactogenicidad.
La industria biofarmacéutica, por su parte, ya produce a gran escala la molécula y para lograrla, varias instituciones científicas unen conocimiento y experiencia en la producción de fármacos con buenas prácticas.
En el caso de Abdala, los laboratorios Aica, del grupo empresarial BioCubaFarma, son los encargados de la producción.
Sus directivos explicaron de manera previa que la industria presenta suficiente capacidad instalada, con tecnología para elaborar más de 100 mil bulbos diarios, con volúmenes de llenado de 12 mil por hora.
Soberana 02 y Abdala no son las únicas formulaciones antiCovid-19 que lleva adelante la comunidad científica cubana.
Investigan otras dos moléculas, Soberana 01( IFV) y Mambisa (CIGB), esta última la única diseñada por vía nasal.
La idea es trabajar en varias formulaciones para beneficiar a personas de diferentes edades y tener la posibilidad de vacunar a toda la población, según los especialistas.
Cuba podría tener inmunizada a gran parte de su población en este 2021.
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