En el puesto limítrofe de Las Manos, el secretario de Estado en el Despacho de Educación de Honduras, Arnaldo Bueso, entregó la flama a la ministra nicaragüense de Educación, Miriam Raudez.
El portal del gobierno, El 19 Digital, reseñó que Bueso destacó los esfuerzos realizados por mantener con vitalidad los sistemas educativos de los dos países, a pesar de la incidencia de la pandemia de Covid-19.
Estamos arribando a 200 años de historia viva, un acto que merece toda la relevancia posible, dijo el funcionario acerca de la importancia de continuar la tradición del paso de la simbólica tea por los cinco países centroamericanos que lograron su independencia de la corona española el 15 de septiembre de 1821.
Raudez calificó la acción conmemorativa como un ejemplo de la unidad de los pueblos de la región y agradeció al presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, por la acogida al trayecto de este símbolo de la gesta, el cual refuerza la integración, hermandad y la fraternidad entre Honduras y Nicaragua.
Con posteridad Nicaragua traspasará la Antorcha centroamericana a su vecina del sur, Costa Rica, última estación del recorrido iniciado en Guatemala.
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