El Gobierno instaló en la región mesas de trabajo para atender las posibles exigencias de esa comunidad, ‘pero los movilizados se abstienen de mostrar su pliego petitorio’, lamentó el viceministro de Autonomías Álvaro Ruíz.
‘Hoy, mañana y el domingo trabajaremos con las diferentes subcentrales originarias del lugar en busca de conclusiones, aunque hay pronunciamientos suyos que demuestran falta de apoyo’, aseguró el funcionario a la Agencia Boliviana de Información.
Pese a que los marchistas son afines al gobernador derechista de Santa Cruz, Fernando Camacho, sus exigencias ‘no serán diferentes a las ya planteadas en otras mesas’, explicó Ruíz.
‘Respetamos la marcha –admitió- mientras la representación orgánica de los pueblos indígenas trabaja ya desde ahora junto a nuestras autoridades de Gobierno para resolver sus problemáticas’.
Puedo asegurar que cuando entreguen el pliego, que llevan unos 20 días sin divulgar, ya tendremos avances en nuestras mesas de trabajo, insistió el viceministro.
El Gobierno anunció el lunes pasado la celebración de estos encuentros y aseguró que ‘algunas demandas tendrán una respuesta inmediata, mientras otras llevarán su proceso’.
Por su parte, el representante de la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente, Chaco y Amazonía, José Manuel Pintola, reveló que la marcha ‘responde a intereses personales de exdirigentes de esas comunidades’.
El responsable comunitario alegó que la caminata está presidida por Adolfo Chávez y Marcial Fabricano, otrora líderes del sector, ‘pero ahora sin representatividad porque no fueron elegidos por las organizaciones indígenas legítimas’.
Autoridades del Gobierno, por su lado, acompañan a los marchistas, quienes partieron de Beni el 25 de agosto, y les facilitan medicinas y alimentos, luego de entregarles un camión para que el movimiento sea más seguro, explicó el Ejecutivo en un boletín.
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