Al intervenir en el 76 período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, los mandatarios prometieron la donación de millones de dosis de inmunógenos a otros países y destacaron la necesidad de fortalecer el trabajo de la Organización Mundial de la Salud.
Nadie estará seguro hasta que lo estemos todos. Es inaceptable el bajo nivel de vacunación en África. La solidaridad es fundamental en los momentos actuales, aseveró De Croo.
Asimismo, instó a incrementar el intercambio de conocimientos e impulsar la producción de fármacos mediante la transferencia de tecnologías a otros Estados.
Tenemos que prepararnos para futuras pandemias. El coronavirus SARS-CoV-2 se cobró la vida de más de cinco millones de personas y la pobreza extrema continúa en ascenso. Ninguna nación puede enfrentar esos desafíos por sí sola, aseveró.
De su lado, Frederiksen defendió la necesidad de actuar por el bien común y afirmó que la solidaridad debe ser también la guía en el enfrentamiento al cambio climático.
Los jefes de Gobierno expresaron su preocupación por la violación de los derechos de las mujeres y las niñas en Afganistán y alertaron sobre el empeoramiento de la crisis migratoria.
Además, apostaron por el multilateralismo y un orden mundial basado en el estado de derecho.
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