Citu logró desbancar de la jefatura del PNL al exjefe de Gobierno Ludovic Orban para poner fin al capítulo de una enconada lucha interna dentro de esa formación que a principios de este mes provocó la ruptura de la coalición tripartita en el ejecutivo, creada en diciembre pasado.
En su afán por lograr la aprobación de un plan de ayuda de 10 mil millones de euros para el desarrollo de las regiones, el actual primer ministro provocó la renuncia del titular de Justicia Stelian Ion, el pasado día 1, a lo cual siguió la dimisión de otros cinco.
Los miembros renunciantes del gabinete, incluido el viceprimer ministro Dan Berna, pertenecen a la alianza centrista USR-PLUS, que junto con la Unión Democrática de Rumania forman el ejecutivo tripartito.
Para la dirección de la USR-PLUS, Citu buscaba contentar a dirigentes regionales del PNL para garantizar su voto favorable en el congreso de ese partido, realizado este sábado, con el fin de desbancar a Orban.
El conflicto interno, además de provocar la ruptura de la alianza en el poder, dejó a Citu al frente de un gabinete en minoría que ahora podría enfrentar una moción de censura, en caso de que el Tribunal Constitucional de su visto bueno para ese procedimiento.
La coalición USR-PLUS cerró filas con la Alianza para la Unión de los Rumanos en su propósito de presentar el referido voto de confianza en el legislativo.
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