Muchos niños palestinos continúan siendo víctimas de las agresiones, advirtió el alto representante en el Consejo de Seguridad.
En su reporte ante ese organismo de la ONU, también expresó inquietud por la continua violencia relacionada con los colonos israelíes en Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental.
Asimismo, recordó que el lanzamiento de cohetes y artefactos incendiarios hacia centros de población israelíes viola el derecho internacional y debe cesar.
La situación en la franja de Gaza requiere urgentemente soluciones políticas que se centren en trabajar para promover la unidad entre palestinos, levantar los cierres impuestos por Tel Aviv y, en última instancia, regresar a un proceso de paz que ponga fin a la ocupación y permita la creación de dos Estados, recalcó.
También pidió un mayor esfuerzo por parte de la comunidad internacional de cara a abordar el complejo escenario en tierras palestinas e impulsar y reactivar las negociaciones en pos de solución política del conflicto.
Según informó, en meses recientes no se aprobaron ni licitaron nuevos planes de viviendas para asentamientos judíos, pero continuaron las demoliciones y confiscaciones de estructuras de propiedad palestina en toda Cisjordania ocupada, incluida Jerusalén Oriental.
La violencia diaria también continúa y en total, 27 palestinos murieron a manos de las fuerzas de seguridad israelíes y mil 445 resultaron heridos, indicó.
En tanto, murió un soldado de la fuerza militar de Tel Aviv y 41 israelíes resultaron heridos, agregó.
Wennesland se refirió de forma optimista a una reunión entre el presidente palestino, Mahmoud Abbas, y el ministro de Defensa israelí, Benny Gantz, realizada el pasado 30 de agosto, la primera entre ambas partes en años.
En 1947 la Asamblea General de la ONU votó a favor de una división de la Palestina histórica para árabes y judíos, pero estos últimos durante el conflicto que estalló al año siguiente se apoderaron de más territorio del que les correspondía.
Dos décadas después, Israel ocupó el resto de la zona: la franja de Gaza, Cisjordania y Jerusalén oriental.
Actualmente, la mayoría de la comunidad internacional coincide en que es Israel quien debe acabar con la colonización de territorio palestino para avanzar hacia la paz, y que solo una solución biestatal podrá traer estabilidad a la región.
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