Este grupo, que no figuraba inicialmente en el plan de inmunización en curso, fue incluido en la Ley de Emergencia para atender la pandemia aprobada semanas atrás por el Congreso, ante lo cual el Mspas creó una mesa técnica en función de garantizar las condiciones en todo el país en dependencia de la disponibilidad del biológico adecuado.
Actualmente, transcurre la fase 4, para mayores de 18 años, con el aporte fundamentalmente de donaciones y compras directas a Rusia (ocho millones de Sputnik V), así como al mecanismo Covax, creado por Naciones Unidas para facilitar el acceso.
El pasado lunes se conoció que el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social comenzó a inocular a varios niños con supuestas enfermedades crónicas sin que Salud lo autorizara, lo que generó más críticas sobre irregularidades en el ya cuestionado plan.
Ese mismo día, una nota del Mspas aclaró que se trató de un pequeño grupo que voluntariamente se presentó por tener cardiopatías y otros padecimientos y se le suministró la vacuna antiCovid-19 por contar con existencias.
La cartera precisó ayer que la inmunización arrancaría con esos casos como prioridad desde el departamento de Huehuetenango, donde esperan llegar a 30 mil menores en una semana y concentraron al personal sanitario de todos sus municipios para lograrlo, una estrategia que también comenzó en el de Quiché, con el 90 por ciento de cobertura en mayores de 18 años.
La víspera, divulgó que el 11,5 por ciento de los 13 mil 525 fallecidos en Guatemala por la Covid-19 tenían menos de 40 años, de ellos 98 no superaban los nueve años.
De acuerdo con la institución, un total de 192 personas menores de 20 años perdieron la batalla contra la enfermedad causada por el coronavirus SARS-CoV-2, desde su entrada aquí el 13 de marzo del pasado año.
Desde entonces suman 557 mil 244 contagios, una cifra entre las más altas de Centroamérica junto a los decesos, en medio de una tercera ola que puso en crisis al débil sistema público hospitalario por la alta demanda de camas de intensivo y personal especializado para la atención de pacientes graves y moderados.
Si bien en la última semana descendieron levemente los casos positivos diarios (en promedio cuatro mil), las autoridades de Salud insisten en que la población mantenga el uso de mascarilla obligatorio y aceleran el plan de vacunación, uno de los más lentos del área.
Aproximadamente 2,3 millones de guatemaltecos ya tienen el esquema completo y otros 4,5 millones una dosis, precisó el Mspas; sin embargo, con más de 16,3 millones de habitantes, la meta de cubrir al menos el 70 por ciento de la población está aún lejana.
mgt/mmc