En cumbre de emergencia realizada en Durazno, cada región informó de la cancelación de eventos tradicionales como la Semana Criolla, los festejos de San Patricio y una boda para 500 invitados en Maldonado, así como el cierre de termas, balnearios y centros de recreos.
Mientras dure el decretado Estado de Emergencia Sanitaria de alcance nacional se suprimen competencias deportivas, y hasta las sesiones de entrenamientos de los equipos de fútbol del torneo de Apertura, que suelen atraer hinchas a los recintos.
Respecto al departamento Salto, cuyo eventual cierre se mantiene en consideración, el presidente territorial y del Comité de Emergencia, Alejandro Noboa, confirmó el cierre de los complejos termales, y la invitación a visitantes a que regresaran a sus lugares de origen, pero “la situación puede cambiar de un momento a otro y no se descartan medidas de otra índole”.
De allí son dos de los seis casos positivos de COVID-19 en Uruguay, una madre e hija que regresaron de Milán, se trasladaron en autobús desde la terminal aérea hasta la localidad y tienen familia numerosa según apuntó el grupo de trabajo de epidemiologia, al referirse a más de 200 residentes en cuarentena.
Entretanto la presidenta de la Suprema Corte de Justicia, Bernatte Minvielle, informó a la población que a partir de este lunes el Poder Judicial entrará en receso sanitario con la aclaración de que todos los actos procesales cumplidos mantendrán su validez.
Según el director general de la Salud, Miguel Asqueta, las cifras de contagios pueden cambiar en hora y en la actualidad hay “unos 20 o 25 casos a estudio” de cuyos resultados prometió informar.
Autoridades sanitarias accedieron al registro de dos mil 586 personas que viajaron y pasaron por el aeropuerto de Carrasco y de ellos detectaron “521 individuos que provenían de zonas de riesgo” (China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Irán, Italia, Francia, España y Alemania) a los que se les hará un “seguimiento dinámico”.
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